Efectos de la industria petrolera sobre el suelo
El petróleo es un líquido oleoso de origen natural compuesto por sustancias orgánicas. Se utiliza como materia prima para los combustibles, plásticos, pinturas y textiles. Se encuentra en grandes cantidades bajo la superficie terrestre, motivo por el cual se ha desplegado toda una tecnología para su extracción. El problema radica en que causa diferentes efectos sobre la composición y el relieve de los suelos.
Apertura
de caminos
Para iniciar la explotación en un pozo, se
realiza el desmalezado y alisado del terreno para el desplazamiento de los
equipos. Esta acción destruye la vegetación, ahuyenta a los animales y compacta
el suelo.
Una de las técnicas más utilizadas para la
apertura de caminos consiste en remover los primeros 20 o 30 cm de suelo para
nivelar el terreno. Al retirarse el material grueso, queda expuesto el suelo formado
por granos más finos, el cual se va perdiendo por acción del viento y del agua,
produciéndose su erosión.
En
los sitios más bajos se rellena con el material remanente, modificando el
relieve. Además, es común que junto a los caminos se originen canteras como áreas
de extracción de materiales de construcción.
El
tránsito constante de la maquinaria pesada provoca una gran compactación del
suelo y genera grietas y surcos que encausan el agua, creando nuevas grietas en
los terrenos con pendiente.
Son las áreas de explotación que consisten
en superficies niveladas con maquinaria pesada. Presentan una gran compactación
del terreno.
Perforación
Las perforaciones alcanzan a tener
profundidades considerables, como en algunos pozos que llegan a 6 000 m bajo la
superficie. Hasta hace poco se realizaban perforaciones verticales dejando
varios orificios.
Hoy
se usan taladros de perforación direccional que pueden dirigirse hacia zonas
inaccesibles, evitando la perforación de múltiples pozos.
El principal efecto de establecimiento de
estas locaciones, llamadas también plataformas, es la pérdida de la capa orgánica
y la compactación del suelo.
Durante la fase de extracción de petróleo,
el suelo puede ser contaminado con agua de formación, la cual generalmente
contiene metales pesados o petróleo, debido principalmente a errores humanos.
Contaminación por derrames accidentales
Puede ocurrir por la liberación accidental
de este hidrocarburo en cualquier punto de las operaciones de explotación o
transporte del petróleo.
El petróleo contiene varios contaminantes
que se mezclan en el suelo, deteriorando su calidad, y que son tóxicos para
cualquier ser vivo que dependa de él. Entre ellos están algunos compuestos orgánicos
volátiles (COVs), hidrocarburos aromáticos policíclicos (PAHs) y metales
pesados.
Los
más alarmantes son los PAHs y sus derivados.
Se consideran compuestos persistentes, ya
que tienen la capacidad de mantenerse en el suelo durante períodos largos. No
son solubles en agua pero sí en las grasas, lo cual hace que se acumulen en los
tejidos grasos de los animales.
Al entrar en las cadenas alimenticias
causan efectos irreversibles en la materia genética, produciendo mutaciones y
tumores malignos en los diversos tipos de seres vivos que entren en contacto
con el suelo o las aguas contaminadas.